La marca de los cuatro aros nos ofrece una versión cabrio de su atractivo coupé. Aprovechando las cualidades de un modelo de alta gama, realiza su versión descapotable con capota de lona de alta calidad, muy aislante. Su interior es para cuatro ocupantes (más justos los traseros) que disfrutarán de toda la ingeniería y calidad de Audi. También se vende la versión deportiva S5, con su poderoso motor de 333 CV.
Tanto en la marca Fiat como en su variante deportiva ofrecida por Abarth, el 500 es un utilitario con mucha personalidad, así que más aún en su versión cabrio. Una de sus particularidades es que los montantes de la carrocería son fijos, es decir, tan sólo se repliega la parte central superior del techo de lona, que queda recogido sobre el maletero. Se comercializa con dos motores de gasolina y uno diésel, todos ellos muy ahorradores.
El fascinante coupé británico Jaguar XK también dispone de una variante cabrio, que la marca denomina Convertible. Todas las prestaciones, el lujo, la exclusividad y el confort de Jaguar en un descapotable con techo de lona y dos plazas reales, porque las dos traseras tienen una funcionalidad muy limitada. Sus prestaciones son las que se esperan de un coche de su estilo.
Un auténtico clásico en el mercado de los cabrios Mazda MX-5, con enorme éxito comercial que lo convierte en una de las referencias del mercado. Mazda se distingue de otras marcas por ofrecer a sus clientes dos propuestas diferentes de su descapotable: una con techo de lona y otra con cubierta rígida. La primera se considera, por su motorización, como la de acceso a su gama, mientras que la Roadster Coupé cuenta con propulsores más potentes.
La marca de la estrella cuenta con diferentes opciones descapotables, pero quizá el clásico Mercedes-Benz SLK sea el más equilibrado, además de que acaba de ser recientemente renovado. Es una auténtica preciosidad, su conducción es placentera, tanto con capota como sin ella, y goza de toda la calidad y la fiabilidad que dan fama a Mercedes. Eso sí, su precio no es lo que se dice precisamente bajo.
Otro capricho a escala para disfrutar de la utilización a cielo descubierto el Mini Cabrio. Su última generación ha mejorado en muchos aspectos, incluyendo en la conducción sin capota y el accionamiento de la misma. Tiene cuatro plazas, aunque las traseras son realmente justas. Lo que mantiene es el carácter de la marca, tanto en su comportamiento como en sus posibilidades de personalización.
Fue en su momento uno de los precursores del concepto CC (coupé-cabrio) que se ha actualizado con un importante salto adelante, tanto en su imagen como en su equipamiento. Su aspecto ahora es más exclusivo e imponente desde el primer golpe de vista. Tiene, además, detalles interesantes para su utilización a cielo descubierto, como un sistema de calefacción para la nuca en los asientos es el nuevo Peugeot 308CC.
Los amantes de la conducción deportiva tampoco tienen que renunciar al placer de ponerse al volante de un descapotable. Y una de las marcas que mejor ha interpretado esta combinación de dinamismo y disfrute es Porsche, que ofrece varias versiones con tales características, incluyendo muna tan clásica y deseada como el 911.
Ya es todo un clásico en las calles de la gran ciudad el Smart fortwo Cabrio, incluyendo en su simpática versión descapotable. Su techo de lona se repliega aunque los montantes traseros se mantienen fijos. Es un coche biplaza, ideal para su utilización urbana, con motores (gasolina y diésel) realmente poco gastadores y de prestaciones suficientes para un coche de su tamaño y peso.
Un modelo que, sin duda, no puede faltar en un repaso a los descapotables más deseados por los automovilistas es el Volkswagen Beetle Cabrio. Y es así desde sus versiones originales, ya tan lejanas en el tiempo, porque disfruta de un aspecto desenfadado y divertido, ideal para un coche con carácter lúdico como es un cabrio. Tiene una capota de lona, no podía ser de otro modo, y toda la calidad de los productos de Volkswagen, incluyendo sus prestigiosos motores.
Tanto en la marca Fiat como en su variante deportiva ofrecida por Abarth, el 500 es un utilitario con mucha personalidad, así que más aún en su versión cabrio. Una de sus particularidades es que los montantes de la carrocería son fijos, es decir, tan sólo se repliega la parte central superior del techo de lona, que queda recogido sobre el maletero. Se comercializa con dos motores de gasolina y uno diésel, todos ellos muy ahorradores.
El fascinante coupé británico Jaguar XK también dispone de una variante cabrio, que la marca denomina Convertible. Todas las prestaciones, el lujo, la exclusividad y el confort de Jaguar en un descapotable con techo de lona y dos plazas reales, porque las dos traseras tienen una funcionalidad muy limitada. Sus prestaciones son las que se esperan de un coche de su estilo.
Un auténtico clásico en el mercado de los cabrios Mazda MX-5, con enorme éxito comercial que lo convierte en una de las referencias del mercado. Mazda se distingue de otras marcas por ofrecer a sus clientes dos propuestas diferentes de su descapotable: una con techo de lona y otra con cubierta rígida. La primera se considera, por su motorización, como la de acceso a su gama, mientras que la Roadster Coupé cuenta con propulsores más potentes.
La marca de la estrella cuenta con diferentes opciones descapotables, pero quizá el clásico Mercedes-Benz SLK sea el más equilibrado, además de que acaba de ser recientemente renovado. Es una auténtica preciosidad, su conducción es placentera, tanto con capota como sin ella, y goza de toda la calidad y la fiabilidad que dan fama a Mercedes. Eso sí, su precio no es lo que se dice precisamente bajo.
Otro capricho a escala para disfrutar de la utilización a cielo descubierto el Mini Cabrio. Su última generación ha mejorado en muchos aspectos, incluyendo en la conducción sin capota y el accionamiento de la misma. Tiene cuatro plazas, aunque las traseras son realmente justas. Lo que mantiene es el carácter de la marca, tanto en su comportamiento como en sus posibilidades de personalización.
Fue en su momento uno de los precursores del concepto CC (coupé-cabrio) que se ha actualizado con un importante salto adelante, tanto en su imagen como en su equipamiento. Su aspecto ahora es más exclusivo e imponente desde el primer golpe de vista. Tiene, además, detalles interesantes para su utilización a cielo descubierto, como un sistema de calefacción para la nuca en los asientos es el nuevo Peugeot 308CC.
Los amantes de la conducción deportiva tampoco tienen que renunciar al placer de ponerse al volante de un descapotable. Y una de las marcas que mejor ha interpretado esta combinación de dinamismo y disfrute es Porsche, que ofrece varias versiones con tales características, incluyendo muna tan clásica y deseada como el 911.
Ya es todo un clásico en las calles de la gran ciudad el Smart fortwo Cabrio, incluyendo en su simpática versión descapotable. Su techo de lona se repliega aunque los montantes traseros se mantienen fijos. Es un coche biplaza, ideal para su utilización urbana, con motores (gasolina y diésel) realmente poco gastadores y de prestaciones suficientes para un coche de su tamaño y peso.
Un modelo que, sin duda, no puede faltar en un repaso a los descapotables más deseados por los automovilistas es el Volkswagen Beetle Cabrio. Y es así desde sus versiones originales, ya tan lejanas en el tiempo, porque disfruta de un aspecto desenfadado y divertido, ideal para un coche con carácter lúdico como es un cabrio. Tiene una capota de lona, no podía ser de otro modo, y toda la calidad de los productos de Volkswagen, incluyendo sus prestigiosos motores.
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